El colesterol LDL se deposita en las arterias provocando que se estrechen y endurezcan y bloqueen el flujo de la sangre al corazón

Los niveles de colesterol LDL no deben superar los 130 mg/dl

El colesterol es un tipo de grasa presente en las células, fundamental para el buen funcionamiento del organismo. Sin embargo, dependiendo del tipo, el colesterol puede ser bueno o ser un colesterol malo. Por ello es importante distinguirlo. Y conocer cómo el colesterol LDL, el colesterol malo, puede perjudicar a nuestra salud y qué hacer para controlarlo.

No hay que demonizar al colesterol. Como otras sustancias de nuestro organismo cumple una importante función. Interviene en la formación de ácidos biliares, vitales para la digestión. Además los rayos solares lo transforman en vitamina D y así se protege la piel de agentes químicos y se evita la deshidratación. Y por último, a partir de él se forman ciertas hormonas, como las sexuales y las tiroideas.

Sin embargo, existe lo que conocemos como el colesterol bueno y el colesterol malo. El primero es el HDL que es producido por el organismo y se encarga de transportar el exceso de colesterol al hígado para que sea destruido. Sus valores deben estar siempre por encima de 40mg/dl.

Por el contrario el colesterol LDL es el colesterol malo. Lo produce el hígado y se distribuye por el organismo. Debe estar siempre controlado y mantenerse en los niveles adecuados, 130, 100, 70 o 50 mg / dl, según los hábitos de vida y los antecedentes clínicos de cada persona. Ese control permite que el cuerpo pueda producir las hormonas derivadas del colesterol correctamente. Además impide que el colesterol sobrante se deposite en la pared de la arteria, lo que contribuye a su progresivo estrechamiento originando la arterosclerosis. Esta enfermedad hace que las arterias se endurezcan y se estrechen, lo que disminuye o bloquea el flujo de sangre a su corazón. Y como la sangre transporta oxígeno al corazón, esto significa que su corazón no podrá obtener suficiente oxígeno. Entonces aparecen las anginas o un ataque al corazón.

La suma del colesterol HDL y del colesterol LDL es el colesterol total. Tener el colesterol total alto representa un riesgo elevado de enfermedades cardiovasculares y, por esto, sus valores no deben estar por encima de los 190mg/dl.

¿Por qué tengo el colesterol alto? El aumento del colesterol total es producido por múltiples causas. Unas suelen provenir por alteraciones genéticas o del metabolismo, que en muchas ocasiones tienen antecedentes familiares. También hay algunas enfermedades como la diabetes o la enfermedad renal crónica que pueden causar un nivel más alto de colesterol LDL. Pero en muchos casos, esa situación viene provocada por un estilo de vida no saludable: una alimentación inadecuada, la falta de ejercicio, el sedentarismo, obesidad, fumar, alcohol, el estrés…

En esas causas se hayan las claves para bajar el colesterol malo. Los cambios en el estilo de vida son fundamentales para bajar el colesterol LDL:

• Dieta saludable. Limitando la cantidad de grasas saturadas y trans e incrementando el consumo de frutas, verduras, fibra, carnes magras y pescado. Además así aumentarás el nivel del colesterol bueno.
• Bajar de peso. Tanto para las personas con diabetes, como aquellas que tienen problemas de metabolismo o las que tienen el colesterol LDL alto, el control de peso le ayudarán a bajar el colesterol.
• Hacer ejercicio de forma regular ayuda a bajar de peso y a controlar el colesterol.
• Di adiós al estrés. Diversos estudios han relacionado el estrés crónico con el aumento del colesterol malo y el descenso del bueno.
• Deja el tabaco. Con ello se consigue elevar el colesterol bueno. Además este tipo de colesterol ayuda a eliminar el colesterol LDL de las arterias.
• Medicación. Hay diferentes medicamentos que ayudan a bajar el colesterol y mantenerlo controlado. Es necesario acudir a su médico para que le asesore sobre cuál es la mejor opción para usted.